Mensaje del Director Mayo 2023MAYO 2023

INNOVACIÓN, CLAVE PARA LA SOSTENIBILIDAD

Uno de los distintivos esenciales del Homo Sapiens es que es capaz de innovar; de ver como se hace una cosa y tratar una vez la logre entender, así sea parcialmente, promover cambios, alternativas, alteraciones, para plantearse en un círculo virtuoso eterno, preguntas de como desarrollarnos más y mejor.

Bajo ese contexto, sin duda la innovación es una herramienta esencial para la sostenibilidad, entendida esta como la integración armónica de las dimensiones ambientales, sociales y económicas para satisfacer las necesidad de las generaciones presentes sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras para satisfacer sus propias necesidades, e incluso mejorando las condiciones para que puedan tener opciones mejores de satisfacciones futuras. Es decir mejorar y tener más opciones. Para ello la innovación entra en el campo de las nuevas ideas, métodos y tecnologías de todo tipo y en todos los ámbitos para procurar la solución de problemas actuales, mejorar, para bien los procesos existentes, y promover un mejor mundo, bajo el paraguas del respeto profundo por los derechos humanos, en un ambiente de integridad y transparencia.

Recordemos que la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) es la apuesta global, consensuada por todos los países, con el fin de mejorar las condiciones sociales bajo la premisa esencial de la erradicación de la pobreza, tener acciones tendientes a la protección del planeta y procurar que haya una prosperidad para todos. En esta visión, la innovación es una herramienta que permite acelerar los postulados de la Agenda a través de soluciones creativas y efectivas, siempre teniendo como referencia estos desafíos globales.

El Objetivo de Desarrollo Sostenible ODS 9 integra tres elementos centrales como lo son la industrialización sostenible, la infraestructura resiliente y la innovación. En la práctica, las tres íes. Para ello la meta 9.5 habla especialmente en la necesidad de aumentar la investigación científica y mejorar la capacidad tecnología de los distintos sectores productivos. Y es que prácticamente en todos los ODS tienen que ver con la innovación.

A manera de ejemplo, en un primer clic, el ODS 7, Energía asequible y no contaminante, necesita de la innovación para garantizar el acceso universal, aumentar el porcentaje de energía renovable y aumentar significativamente (más que duplicar) los programas y proyectos de eficiencia energética.

En el ODS 8, Trabajo decente y crecimiento económico, es indispensable lograr niveles más elevados de productividad económica mediante la diversificación, la modernización tecnología y el conocimiento, por lo que la innovación juega un papel transcendental. Esto implica lograr un empleo pleno y productivo garantizado un trabajo decente para todos los hombres y mujeres, bajo un entorno seguro y amigable.

En el ODS 11, Ciudades y comunidades sostenibles, sin duda hay que innovar para ayudar a desarrollar tecnologías que faciliten la adecuada planeación urbana, la gestión catastral, arquitectura bioclimática, los procesos de movilidad sostenible, la gestión del riesgo, y la configuración económica para generar mayor eficiencia general.

En el ODS 12, Producción y consumo responsables, hay que garantizar las modalidad de consumo y producción sostenibles. Hay que innovar para reducir el desperdicio de alimentos, la gestión racional de los productos químicos y de todos los desechos a lo largo de su vida útil. También hay que innovar para disminuir la generación de desechos a través de la prevención, reducción, reciclaje y reutilización. En donde la Economía Circular no sea un lema de una campaña coyuntural, sino la estrategia central para avanzar en un mundo mejor, con mejores y más recursos y con un uso racional y resposable de los mismos.

Ni que decir con el ODS 13: Acción por el clima, donde a partir de la innovaciónb se puede lograr una reducción efectiva de las emisiones de gases de efecto invernadero y las medidas necesarias para la adaptación al cambio climático.

O en el ODS 2, Hambre Cero, donde se debe duplicar la productividad agrícola mejorando los conocimientos técnicos, asegurar la sostenb ilidad de los ssitemas de producción de alimentos, aplicar prácticas resilientes y mantener la diversidad genética de las semillas, plantas cultivas y los animelaes de granja y domesticados y sus especies silvestres conexas.

En Colombia el ecosistema de innovación a pesar de que se han venido realizando esfuerzos importantes para fomentar la inversión, los resultados siguen siendo muy limitados. El pòrcentaje para innovación, investigación y desarrollo con relación al PIB es muy bajo, comparado con todos los países de la OCDE. Y aquí está el verdadero reto para avanzar. Según el Índice Global de Innovación 2021, Colombia se ubica en la posición 63 a nivel mundial en materia de innovación. Se tiene una estructura institucional a nivel ministerial. Y una serie de iniciativas públicas y privadas pero claramente hay que hacer un esfuerzo mucho mayor.

La Red del Pacto Global, tanto a nivel mundial, como en Colombia, están apalancando el concepto de Objetivos Basados en Ciencia, como una elemento esencial para poder concretar de mejor manera los esfuerzos conjuntos hacia un estadio mejor de sostenibilidad.

En conclusión, la innovación es una herramienta clave para la consecución de la Agenda 2030 y los ODS. Se necesita una mayor inversión en investigación y desarrollo, así como una cultura de innovación y emprendimiento para hacer frente a los desafíos globales y lograr un futuro más sostenible para todos.

Mauricio López
Director Ejecutivo Pacto Global Red Colombia