2.2.  ODS de la Práctica:

ODS 8: Promover el crecimiento económico sostenido, inclusivo y sostenible, el empleo pleno y productivo y el trabajo decente para todos

2.3. Meta(s) del ODS a la cual aporta su buena práctica:

8.2. Lograr niveles más elevados de productividad económica mediante la diversificación, la modernización tecnológica y la innovación, entre otras cosas centrándose en los sectores con gran valor añadido y un uso intensivo de la mano de obra.

8.3. Promover políticas orientadas al desarrollo que apoyen las actividades productivas, la creación de puestos de trabajo decentes, el emprendimiento, la creatividad y la innovación, y fomentar la formalización y el crecimiento de las microempresas y las pequeñas y medianas empresas, incluso mediante el acceso a servicios financieros.

8.5. De aquí a 2030, lograr el empleo pleno y productivo y el trabajo decente para todas las mujeres y los hombres, incluidos los jóvenes y las personas con discapacidad, así como la igualdad de remuneración por trabajo de igual valor.

8.6. De aquí a 2020, reducir considerablemente la proporción de jóvenes que no están empleados y no cursan estudios ni reciben capacitación.

2.4. Objetivo/s de la práctica:

Objetivo principal: promover el desarrollo integral, el fortalecimiento de habilidades psicosociales para la vida, el uso del tiempo libre, la formación en programas técnicos y la inserción laboral formal para jóvenes entre 16 y 29 años en Bogotá y Medellín.

Objetivos específicos:

1. Implementar acompañamiento psicosocial a jóvenes, para fortalecer sus proyectos de vida en Bogotá.
2. Desarrollar metodologías artísticas y culturales que propicien el buen uso del tiempo libre en Bogotá.
3. Apoyar a jóvenes residentes de Bogotá y Medellín, con un proceso de formación técnica laboral y complementaria para promover su empoderamiento económico.

2.5. Iniciativa implementada:

El proyecto “Somos Talento Joven” buscó transformar la vida de 1.220 jóvenes en Bogotá y Medellín, impactando positivamente su desarrollo social y económico. A través de la articulación entre las organizaciones participantes, se trabajó con dos grupos de acción para promover el desarrollo integral de los jóvenes.

Desde lo psicosocial, se implementó el “plan de resiliencia juvenil” con 300 jóvenes entre los 20 y 29 años de los barrios Potosí y Caracolí de Bogotá, así como con sus familias. Se buscó fortalecer las capacidades emocionales relacionadas con la resiliencia en el territorio. Fue un proceso marcado por un enfoque artístico y cultural que generó puntos de encuentro desde la emocionalidad y los elementos identitarios de los jóvenes y sus familias. El uso del tiempo libre se aprovechó para mitigar en los jóvenes algunas problemáticas que los rodean.

Desde lo educativo, de 16 a 29 años, se formó un grupo de 1.120 jóvenes de Bogotá y Medellín (60 % mujeres) en programas técnico- laborales, vinculados por contratos de aprendizaje, que les garantizó ingresos económicos y experiencia laboral formal.

Las organizaciones aliadas trabajaron en equipo, de manera transparente y abierta, aportando sus saberes y conocimientos, desarrollando estrategias para reducir la deserción, y ejecutando acciones ajustadas a la realidad de la comunidad que garanticen el logro de los objetivos propuestos.

2.6. Gestión y Calidad:

La buena práctica "Somos Talento Joven" se ha creado e implementado a través de un proceso de co-creación y colaboración entre varias entidades y organizaciones locales, lo que ha permitido una comprensión profunda de la problemática y la identificación de soluciones efectivas. Este proceso se ha llevado a cabo a lo largo de varios meses, involucrando reuniones y diálogos con representantes de colectivos juveniles, así como con otras entidades interesadas en abordar los desafíos de la juventud en Bogotá y Medellín.

La práctica se ha diseñado con objetivos claros y específicos, alineados con las temáticas planteadas en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), como la salud y el bienestar, la educación de calidad, el trabajo decente y el crecimiento económico, y la colaboración para alcanzar los objetivos. Estos objetivos se reflejan en las diferentes actividades y resultados del proyecto, que van desde el acompañamiento psicosocial hasta la formación técnica y las oportunidades de empleo.

El proyecto cuenta con un liderazgo sólido por parte de la Fundación SIIGO, que ha liderado la iniciativa aprovechando su experiencia en la inclusión laboral de los jóvenes y su capacidad para establecer alianzas con empresas y otras organizaciones. Además, se han asignado suficientes recursos para la implementación de las actividades planificadas, lo que garantiza su viabilidad y sostenibilidad a largo plazo.

La gestión del proyecto se caracteriza por una orientación a la calidad, evidenciada en la selección de aliados con experiencia en áreas específicas como la formación técnica, el  acompañamiento psicosocial y la promoción cultural. Asimismo, se ha establecido un sistema de seguimiento y evaluación para monitorear el progreso del proyecto y realizar ajustes según sea necesario. La comunicación y el diálogo con los grupos de interés, incluidos los jóvenes beneficiarios, han sido fundamentales para el éxito del proyecto. Se han realizado reuniones periódicas y se ha establecido un espacio de co-creación donde se pueden compartir ideas y retroalimentar el proceso de implementación.

En resumen, la buena práctica "Somos Talento Joven" se ha creado e implementado a través de un proceso participativo, con objetivos claros, liderazgo sólido, gestión eficiente, orientación a la calidad, asignación de recursos adecuados y una comunicación efectiva con los grupos de interés. Estos elementos han contribuido al impacto positivo del proyecto y lo hacen sostenible y replicable en otras comunidades y contextos similares.

2.7.  Innovación:

El proyecto “Somos Talento Joven” presenta un enfoque innovador para abordar la problemática de la salud mental y el desempleo juvenil en Bogotá y Medellín. A través de esta iniciativa, se propone un modelo que combina el fortalecimiento de habilidades psicosociales y la formación técnica con el fin de ofrecer oportunidades económicas y mejorar la calidad de vida de los jóvenes.

Replicabilidad y conexión con los ODS: el proyecto puede ser replicado en otras regiones y contextos debido a su enfoque modular y flexible. Al combinar elementos como el acompañamiento psicosocial, la capacitación técnica y las oportunidades económicas, el proyecto aborda directamente varios Objetivos de Desarrollo Sostenible.

La innovación del proyecto “Somos Talento Joven” radica en su enfoque integral, su uso de arte y cultura como herramienta para la resiliencia, su colaboración con actores locales, y su enfoque práctico para crear oportunidades económicas. Esta combinación de elementos lo convierte en un modelo prometedor para abordar los desafíos de la juventud y su impacto en la sociedad, y puede ser una fuente de inspiración para iniciativas similares a nivel local e internacional.

2.8.  Impacto del Proyecto: 

Las métricas de impacto reflejan una finalización positiva del proyecto. Inicialmente, se tenía previsto alcanzar a 1220 jóvenes como beneficiarios del programa. Esta cifra fue superada en un 129.92%, llegando así a impactar positivamente la vida de 1585 jóvenes como participantes directos del mismo. Además, se esperaba que 250 jóvenes completarán el plan de Resiliencia, y esta meta también fue superada en un 112.4%, con 281 jóvenes completando exitosamente el programa. En cuanto a la capacitación en programas técnicos, se anticipaba que 920 jóvenes se inscribieran, sin embargo, un total de 1428 jóvenes se matricularon, alcanzando una tasa de cumplimiento del 155%. Finalmente, se tenía como objetivo la creación de 920 nuevos empleos, pero este objetivo se superó con creces con la creación de 1168 empleos, un logro del 126.9% sobre la meta establecida.

Este proyecto se distingue por su enfoque innovador y sistémico, que identifica claramente el punto de apalancamiento: la colaboración entre centros de formación vocacional y sector privado para el desarrollo de oportunidades de formación laboral. 

Además, destaca por sus enfoques transversales, como el enfoque de género e inclusión (EGI), evidenciado por el alto porcentaje de participación de mujeres jóvenes. Al menos el 

60% de las personas beneficiarias son mujeres, lo que subraya el compromiso con la equidad de género. Además, se adopta un enfoque interseccional que considera la diversidad de la población atendida.

De igual manera, el proyecto se fundamenta en un enfoque comunitario, donde las organizaciones de base de ambas ciudades contribuyen con su conocimiento y perspectivas sobre las necesidades, desafíos y potencial de los participantes. Esta experiencia se complementa con una sólida colaboración con el sector empresarial, lo que garantiza que todos los jóvenes reciban un respaldo económico desde la etapa de formación, promoviendo así su compromiso y participación continuos en el programa.

2.9. Sostenibilidad en el tiempo: 

Para asegurar la continuidad de los procesos implementados en el diario vivir de la comunidad desde el impacto positivo del proyecto en la vida de los jóvenes y sus familias, se cuenta con las siguientes estrategias:

Desde lo psicosocial: 

• Cartilla/agenda que incluye guía para generar replicabilidad de las actividades en cualquier momento, sea desde el enfoque individual o familiar.
• Grupos de redes sociales con normas construidas de manera colectiva que aseguran la participación y propenden por mantenerse una vez finalice el proyecto.
• Los talleres serán sistematizados para facilitar que las organizaciones involucradas puedan generar proyectos futuros que incluyan la inversión en procesos de este tipo para y con los jóvenes.

Desde lo educativo y laboral:

• Las inversiones en formación y estrategias socioeducativas son herramientas que, en articulación con el sector privado, generarán continuidad laboral para los jóvenes que empiezan a participar en la dinámica económica de las ciudades y serán contratados con base en su titulación técnica, formación integral, experiencia y conocimientos en SIIGO y Excel.
• Al finalizar la etapa práctica, la Fundación SIIGO apoyará la empleabilidad de los jóvenes participantes y hará seguimiento y monitoreo con el objetivo de que encuentren empleo.

2.10. Alianzas:

El proyecto se concretó gracias a una articulación efectiva entre diversos aliados. Las instituciones de formación brindaron el espacio necesario para capacitar a los jóvenes, mientras que las empresas les ofrecieron puestos de práctica esenciales para su desarrollo profesional. Las organizaciones comunitarias desempeñaron un papel fundamental en el apoyo a los procesos formativos individuales y en la dinamización de las actividades juveniles. La Fundación Siigo lideró y actuó como aliado estratégico, coordinando esfuerzos y recursos. Por último, ACDI VOCA supervisó los procesos y garantizó el uso adecuado del presupuesto, asegurando la transparencia y eficiencia del proyecto.

Estas alianzas no solo facilitaron el logro de los objetivos del proyecto, sino que también promovieron el trabajo en equipo y la colaboración intersectorial, elementos cruciales  para el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). La integración de estos actores demostró que la colaboración entre entidades diversas es esencial para generar impacto social positivo y sostenible.